A un año del partir de una amiga

Esta semana, el 17-ene, hace un año de la partida de Hortensia, mi gran amiga. Curiosamente esta semana se me agravó la gripe que me ha tejido en jaque por dos semanas que las recuerdo como cuando una vez me puse así y ella me dió masajito en la espalda para aliviar el cansansio por aquello del "cuerpo cortado", que para los que somos asmáticos es "cuerpo hecho pedazos". Ella sabía bien el cómo me sentía, siempre era así, cuando uno quería explicarle a más detalles sonreía y decia "... para que decir lo que el otro ya sabe, mejor compartamos una sonrisa y la vida..."

A un año que ella se ha ido aún son muy fuertes los recuerdos que me ha dejado, los gatos, la poesía, los sueños que nos platicabamos, y como en cada obra que bordaba, cortaba o armaba en trapos una vida se plasmaba. Al tiempo que redacto esto pienso mucho en ella, no con la tristeza de quien recuerda a otros muertos, sino con las alegrías que tanto compartíamos. ¡Ah mi querida Hortensia!, veo aquí en casa todos los trapitos que me dejó y los veo con un gusto que parecen que realmente estuvieran vivos, lo unico que les falta es que hablen o se muevan solos (igual y lo hacen cuando me duermo, pero mejor así, algún día me platicarán las aventuras de cada uno por las noches o cuando no estoy en casa para verlos).


Hace poco tiempo, un par de meses, vi una película de Estudios Ghibli llamada "Neko no Ogaeshi (Haru En El Reino De Los Gatos / The Cat Returns)" / (2002), en resumen en la peli un gato, de escultura muy fina artesanal sumamente bello, cobra vida al ocultarse el sol, es un varón, gente de la Nobleza, que se dedica a ser un justiciero en la mediación entre el mundo este en que vivimos, de los humanos, y el mundo de los gatos; como es de esperarse es un desconocido en ambos mundos de vivos, pero él conoce ambos mundos a la perfección porque es un gato en su naturaleza, pero fue creado con toda la pasión de un artesano. La tesis de la película para fundamentar la vida del gato es que cuando alguien crea algo con todo su amor, poniendo toda su vida en esa obra, es imposible que esa obra producto de todo ello no tenga vida propia, como consecuencia El Varón, tiene vida propia. Luego en la peli la niña protagonista, Haru, se ve envuelta en una situación inesperada, donde es mal interpretada sus buenas intenciones de salvar a un gato de la muerte, y tanto es el agradecimiento de los gatos que la quieren recompensar, pero tratándola como un gato, no como una humana; en fin, el enredo esta muy bueno y el desenlace es mejor aún, Haru emprende un viaje que en mucho asimila historias inconclusas de otros, pero donde ella tendrá que probarse a sí misma qué es realmente capaz de dar siendo ella misma, no tratando de ser otra persona. Ahora que recuerdo esta peli, miro la imagen de Haru y miro a Hortensia, miro a el Varón-Gato de la peli y miro a tantas obras que Hortensia hizo con sus manitas.



Cierro los ojos y recuerdo cuando soltero compartía el departamento con ella, yo aquí en mi computadora (ordenador) haciendo tarea o trabajo, ella tras la pared haciendo también muchas tareas, en su maquinita de coser, "trrrr, trrr, trrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr, trrrrrrrrrrrrrrrrrrrr, tic, tic, tic, . . . , taca, taca, taca, ..." Ja! recuerdo que era algo arrullador para mi, era como una segunda música de fondo a la que yo ponía en volumen bajito para estudiar. ¡Hijos! que emoción que pasaba a la cocina a y la veía dibujando, luego cortando tela, o cociendo a mano un mono, o cociendo con la máquina. Recuerdo que a veces me mostraba con un "mira Juanito, eh, ¿como lo ves?, jajaja ", y como una madre muestra a un hijo sentada, ella me mostraba su reciente creación.



Ahora que ha pasado el tiempo, no me arrepiento de tanto mono que le compré, otros que me regalo, pero sí de no haberle comprado de otros que hubiera querido tener. En fin, ella hizo mucho para dar y tuvo para repartir.

A un año que se ha ido, yo creo que estos gatos, ratones y demás trapos, por la tarde, al ponerse el sol, sin que me de cuenta, ellos corren a un mundo donde seguramente la verán y le dirán tanto chisme de qué hacemos todos los que por aca la extrañamos tanto, total, dejo tanto mono con tantos amigos y conocidos, que mejores corresponsales no podrá tener, son ahora sus ángeles, sus mensajeros, ellos fueron creados con toda esa alma que les fue infundada que entienden bien de ambas naturalezas, su mundo ideal y este nuestro, pero más allá creo también que un tercer mundo: el de Hortensia, tan grande donde muchos tuvimos cabidad.

Querida Hortensia, ojalá estas palabras enmedio de las estrellas de esta noche lleguen a ti en el correo tuyo, que seguro ahora es un cometa donde irás montada, y desde allá nos sigas acompañando con tus favores de amiga que nunca cesaron y aquí, bien dentro, en nuestro corazón habitan. Te queremos y te recordamos siempre todos tus hijos: Aidee, Aurora, Juan, Emilio, Cornelio, ... y tantos más.


Sonrie querida amiga Hortensia, tu amor dejó huella y vida. Gracias a La Vida que nos ha dado tanto, entre todo eso estas tu.